Actividad No. 11 del 28 de septiembre al 16 de octubre de 2020
LA IGLESIA ES EL CUERPO DE CRISTO
El
Espíritu Santo es el que mantiene la unidad y provee los dones y carismas
necesarios para que cada miembro desempeñe su misión. |
Cuando el Espíritu Santo actúa en las personas es posible la vida en comunidad. Así lo experimentaron los primeros cristianos después de Pentecostés: los creyentes estaban muy unidos, seguían fieles a las enseñanzas de los apóstoles, se reunían para alabar a Dios y partir el pan, comían juntos con alegría y sencillez de corazón y compartían sus bienes para que a nadie le faltara lo necesario (Hechos de los Apóstoles 2, 41-47; 4, 32-37). Este estilo de vida llamó la atención en la sociedad de la época y atrajo a muchos que poco a poco conformaron pequeñas comunidades en diversos lugares. Así empezó la Iglesia, (palabra griega que significa convocación o asamblea), es decir, la asamblea del pueblo reunida por el Espíritu Santo para formar el nuevo cuerpo de Cristo. Es un cuerpo que tiene a Cristo por cabeza y por miembros a todos los creyentes. El Espíritu Santo es el que mantiene la unidad entre la cabeza y los miembros, además de proveer los dones y carismas necesarios para que cada miembro desempeñe su misión para la construcción, crecimiento y servicio de la comunidad.
Carisma es otra palabra griega que significa don gratuito,
regalo. Así pues, los
dones y carismas son capacidades; cualidades que el Espíritu Santo da a cada
persona para que pueda servir a los demás en la comunidad. Entre otros están: enseñar, servir,
profetizar, exhortar, repartir los bienes, practicar la misericordia, presidir
u organizar la comunidad, curar, hacer milagros, hablar en lenguas o interpretarlas,
tener sabiduría o conocimiento. Pablo
enseña que los mejores dones son la fe, la esperanza y el amor (caridad),
destacándose entre ellos, el amor (Primera Corintios 13, 13).
El apóstol Pablo compara a
la comunidad de Cristo con el cuerpo humano.
En estos términos se refiere a que:
Está formada por muchas partes,
pero es un solo cuerpo. |
Todas sus partes son importantes y
se necesitan unas de otras. |
Entre tales partes hay unidad: si
una sufre, todo el cuerpo sufre; si una recibe atención especial, todas
comparten su alegría. |
Cada parte tiene un ministerio, es
decir, un servicio o trabajo para beneficio común. |
Este es el ideal de vida que
persigue la comunidad cristiana, y al cual está invitada toda la humanidad, y
es posible realizarlo por la acción del Espíritu de Jesús que trasforma
interiormente a cada persona para que pueda vivir como verdadero hijo de Dios,
hermano de los demás y amigo de la naturaleza.
El regalo del Espíritu Santo se obtiene por la súplica, por la oración
humilde motivada por el deseo ardiente de ser trasformado.
La vida de Cristo se trasmite, en forma real, pero misteriosa, a
los creyentes a través de los sacramentos.
Esto se evidencia con especial claridad en el bautismo y la
eucaristía. Gracias al primero, una
persona entra a participar de la muerte y la resurrección de Cristo.
La eucaristía, entre tanto, permite que el creyente comparta de
verdad el cuerpo de Cristo, de modo que permanece en comunión con él y con los
demás miembros de la comunidad eclesial.
EL ESPÍRITU SANTO ACTÚA EN LA IGLESIA
Lumen
Gentium, numeral 4 Consumada
la obra que el Padre encomendó realizar al Hijo sobre la tierra (cf. Jn
17,4), fue enviado el Espíritu Santo el día de Pentecostés a fin de
santificar indefinidamente la Iglesia y para que de este modo los fieles
tengan acceso al Padre por medio de Cristo en un mismo Espíritu (cf. Ef
2,18). Él es el Espíritu de vida o la fuente de agua que salta hasta la vida
eterna (cf. Jn 4,14; 7,38-39), por quien el Padre vivifica a los hombres,
muertos por el pecado, hasta que resucite sus cuerpos mortales en Cristo (cf.
Rm 8,10-11). El Espíritu habita en la Iglesia y en el corazón de los fieles
como en un templo (cf. 1 Co 3,16; 6,19), y en ellos ora y da testimonio de su
adopción como hijos (cf. Ga 4,6; Rm 8,15-16 y 26). Guía la Iglesia a toda la
verdad (cf. Jn 16, 13), la unifica en comunión y ministerio, la provee y
gobierna con diversos dones jerárquicos y carismáticos y la embellece con sus
frutos (cf. Ef 4,11-12; 1 Co 12,4; Ga 5,22). Con la fuerza del Evangelio
rejuvenece la Iglesia, la renueva incesantemente y la conduce a la unión
consumada con su Esposo. En efecto, el Espíritu y la Esposa dicen al Señor
Jesús: ¡Ven! (cf. Ap 22,17). Y así toda la Iglesia aparece como «un pueblo reunido en virtud de la unidad del Padre y del Hijo y del Espíritu Santo». |
LA COMUNIDAD CRISTIANA ES OBRA DEL ESPÍRITU SANTO
La familia: Iglesia doméstica
La vida en comunidad es un ideal que construyen los creyentes con la ayuda del Espíritu Santo, quien los transforma y los une. Según la sociología existen diferentes tipos de comunidades:
Tipos de comunidades sociales |
Características de las comunidades sociales |
Características de la comunidad cristiana |
La familia, la tribu |
Se
caracterizan por los vínculos de sangre o de raza. Las
relaciones entre los miembros son cercanas y espontáneas, llenas de
afectividad, confianza, solidaridad y amor. Son
relaciones duraderas. Se
comparten normas y valores. |
Comunidad
de una sola fe: un solo Señor, una sola fe, un solo bautismo, un solo Dios y
Padre4, que está sobre todos, por todos y en todos (Efesios 4, 5-6). Comunidad
de amor: “En esto conocerán que son mis discípulos si se aman los unos a los
otros”. (San Juan 13, 35). |
El barrio, el pueblo, la ciudad,
el país. |
Son
comunidades que comparten un mismo territorio. Las
relaciones van disminuyendo en afectividad.
Se vuelven relaciones formales. Las
relaciones son duraderas, aunque hay gran movilidad de los miembros. Se
comparten normas mínimas de convivencia. |
Comunidad
de servicio: cada miembro tiene su propio don o carisma para el servicio y
construcción de la comunidad (1 Corintios 12). Comunidad
solidaria: los creyentes tenían un solo corazón y una sola alma y ninguno
tenía por propia cosa alguna, sino que todo lo tenían en común. No había entre ellos indigentes y a cada
uno se le repartía según su necesidad. (Hechos de los Apóstoles 4, 32-35). |
Asociaciones y grupos religiosos,
instituciones educativas, empresas y organizaciones. |
Son
comunidades temporales. Los
valores, normas, costumbres e intereses de la colectividad priman sobre los
individuales. Las
relaciones son formales. |
Comunidad
de testimonio: Alababan a Dios y gozaban de la simpatía de todo el pueblo. Y
el Señor agregaba cada día a la comunidad a los que se habían de salvar
(Hechos de los Apóstoles 2, 47) |
ACTIVIDAD
1. Explique cómo puede
usted ayudar para que su familia, sus amigos y vecinos vivan en comunidad.
2. ¿Qué semejanzas y
diferencias encuentra entre la comunidad social y la comunidad cristiana? ¿Qué
conclusión puede sacar?
Fuente utilizada: Creo 6, Editorial San Pablo.